El precio del petróleo y el dólar por las nubes, es el gran impacto económico, solo para comenzar el año; estos factores han provocado la inestabilidad en los mercados. Saúl Ventimilla, Licenciado del ITAM en Economía con especialidad en Finanzas, hace este análisis para Irving Pineda.

Por: Saúl Ventimilla

En primer lugar, me declaro como una persona sin afinidad política ni religiosa; en resumen, soy escéptico.

En segundo lugar, me gustaría tocar el tema económico del momento: el precio del petróleo y el tipo de cambio.

¿Qué está provocando la caída del precio del petróleo? No; no es la “Reforma” Energética ni la captura del Chapo. El problema viene del “no tan lejano” Medio Oriente.

Como sabrán, Medio Oriente es problemática por diversas razones. Una de ellas es el petróleo.

Arabia Saudita, el mayor productor de petróleo del mundo, tiene broncas con Irán, que busca entrar al mercado petrolero para ganar uno que otro dólar. Para evitar su entrada, Arabia Saudita ha decidido aumentar su producción a niveles absurdos con el afán de generar abundancia de petróleo en un mercado cuya demanda no crece.

¿Qué sucede cuando un producto se produce más de lo que se necesita? Su precio baja, es normal.

Irónicamente, se le podría recriminar a Peña no resolver el tema en Medio Oriente… ¿Será México un país tan escaso de problemas, como para que nuestro “brillante” presidente trate de resolverlo? Lo dudo mucho.

Lo que sí podría resolver (y que también dudo que lo haga) es la enorme eficiencia con la que funciona Pemex. Los productores de petróleo más eficientes puede producir un barril de petróleo en aproximadamente 25 dólares; ¡a Pemex le cuesta 80 dólares!

Entonces, es muy fácil tratar de “administrar la abundancia” cuando el precio del petróleo está por encima de los 100 dólares el barril. El teatro se acaba cuando, como ahora, el precio está por debajo de los 30 dólares el barril mexicano.

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¿Esto qué genera? Pánico en los inversionistas extranjeros.

Piense usted, estimado lector, que tiene 100 millones de dólares y lo va a invertir en un país emergente del que sólo sabe que Donald Trump odia a su población (y usted es republicano y va a votar por él). Usted empieza a ver que otros países emergentes empiezan a tener problemas económicos severos (Brasil, China, etc.).

¿Mantendría su dinero en ese país? Lo dudo. Es por esta razón por la que el peso se ha depreciado el último año. Los inversionistas creen que si un país emergente cae, todos caerán como fichas de dominó, por lo que retiran sus inversiones en esos países (México incluido) y lo llevan al país más seguro para sus inversiones: Estados Unidos.

Al final, seamos honestos: ¿tiene la culpa Enrique Peña Nieto? Le dejo a usted responder esta pregunta.

Lo que sí me gustaría comentarle es que no debemos de criticar por el afán de criticar. Debemos de sacarnos esa costumbre de nuestra cultura tan falta de objetividad.

Debemos de criticar a Peña de que sólo ha leído 1 libro en su vida; de su inoperancia para garantizar la seguridad de los mexicanos; de su falta de fortaleza para realizar unas auténticas Reformas Estructurales, y llevarlas a las últimas consecuencias… ¡Y la lista podría seguir!

Veamos pues, que el peso tan barato puede significar oportunidad más que problemática.

@Saulvc_90

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