AMOZOC, PUEBLA (05 de abril de 2018).- El candidato presidencial de la coalición “Por México al Frente”, Ricardo Anaya, consideró al mensaje del presidente Enrique Peña Nieto para su homólogo estadunidense Donald Trump, un primer paso aunque no es suficiente.

Además, exhortó a cerrar filas contra “la amenaza que representa para nuestra nación” el también empresario de Estados Unidos.

“Lo que hemos exigido es que el gobierno federal actúe con absoluta firmeza y dignidad. Es momento de unidad nacional. Esto no es un asunto de campaña, es un asunto de país y en esto tenemos que estar unidos absolutamente todos los mexicanos. (…) Es correcto que se haya fijado una posición por parte del gobierno federal pero no es suficiente. Necesitamos decir con toda claridad al gobierno de Estados Unidos que (…) cese sus amenazas y sus ataques al pueblo de México. Es absolutamente inaceptable que esté planteando militarizar la frontera. Si bien es correcto este paso de dar un mensaje, lo que ahora sigue es dejarle muy claro al presidente de los Estados Unidos que no vamos a tener estos ataques y estas amenazas, y que nosotros nos retiraremos de las negociaciones mientras no cambie está posición”, expresó en entrevista.

En su visita a Amozoc, Puebla, el abanderado remarcó que pondrá especial énfasis en esta entidad así como en Veracruz, ya que merecen mucho mayor respaldo que el que ha recibido hasta ahora del gobierno federal. Incluso recriminó que solo se hayan destinado a 200 policías federales para los cerca de 200 municipios poblanos.

“Eso demuestra que el gobierno federal no está respaldado como debería a Puebla, siendo que el robo de combustible y en las carreteras son delitos federales que corresponderían a la federación estar atendiendo, y no ha habido el respaldo que Puebla se merece. Yo vengo a hacer un compromiso no solamente de estar muy cerca durante la campaña sino de dar todo mi apoyo y todo mi respaldo como Presidente de la República”.

Respecto a la reforma educativa y a sus críticas hechas en días pasados, Ricardo Anaya matizó su discurso y puntualizó que la legislación es buena pero que se encuentra en malas manos con una mala implementación.

“La reforma educativa es una buena reforma pero el gobierno la ha implementado muy mal. Ha sido un desastre la implementación. Es una buena reforma en malas manos. Porque es cierto que lo que no se mide no se puede mejorar, pero se trataba de mejorar la educación, no de castigar a las maestras y los maestros. No se vale que hayan invertido tres veces más en exámenes que en la formación y la capacitación de las maestras y los maestros”.

Con información de Ángel Gallegos

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.