Cuidad de México (20 de julio de 2016).- Varios hombres recluidos en una celda del tribunal penal de la ciudad de Weatherford, en Texas, Estados Unidos, rompieron la cerradura y salieron al pasillo, con el objetivo de ayudar al guardia, quien aparentemente había sufrido de un paro cardiaco.

Antes de que se desplomara sobre la silla, el guardia estaba hablando con los presos y les hacía bromas. Cuando dejó de reaccionar de repente a sus réplicas, ellos se dieron cuenta que estaba mal de salud.

Primero se pusieron a gritar y, al no ser escuchados, se abalanzaron juntos contra la reja hasta que rompieron la cerradura.

Cuando salieron de la celda, los reos se acercaron al oficial desmayado y se aseguraron de si tenía o no pulso. Entonces pidieron a gritos ayuda; los agentes llegaron corriendo.

Primero encerraron a los prisioneros y acto seguido procedieron a los primeros auxilios en espera de un equipo de paramédicos.